sábado, 27 de agosto de 2011

Confieso que nunca he tenido pinta de ser la típica princesa de cuento. Nunca he aspirado a convertirme en una pierde zapatos, jamás he pensado dormir cien años, y aunque nunca he creído apropiado entregar mi voz a nadie, he regalado todas y cada una de mis palabras. Nunca me he visto capaz de luchar por alguien, ni de enamorarme de un inmaduro Peter Pan que no quiere crecer. Pero yo si he creído tener envenenado cada poro de mi cuerpo, y he esperado un beso que no llego jamás cada noche al acostarme. Confieso que nunca me he sabido las coordenadas que tiene un corazón para buscarlo y no perderme mientras le pierdo yo a el. Tampoco he aspirado a convertirme en algo mas que una anti heroína de mi propia historia. Admito que nunca pensé que llegaría a estar aquí, esperando a que aparezca mi hada madrina con un par de converse desgastadas, que los cristales se me rompen, o mejor aún, dejando que el teléfono suene encima de la mesa porque mi Peter Pan, le ha dado por hacerse mayor.

viernes, 19 de agosto de 2011

Todas;

 quieren llevar altos tacones, faldas cortas y estrechas camisetas, 4 kilos de maquillajes y un novio perfecto. ¿Pero acaso eso les dará la felicidad? No se dan cuenta que no viven su vida, no toman decisiones, no tienen aventuras...Yo no soy así ni lo quiero hacer, tomo de todo incluso decisiones, río cuando tengo que llorar, salto cuando tengo que andar, toco el cielo acostada en mi cama.

Ven;

que el tiempo pasa y yo te echo de menos.

Nunca;

lo pensamos, ni lo imaginamos, pero... así sucedió.

Porque no hay nadie más;

que ocupe tú lugar.

miércoles, 17 de agosto de 2011

¿Un clavo saca a otro clavo?

.Un clavo saca a otro clavo. Típica expresión que todo el mundo usa de consuelo cuando, por alguna ridícula razón estas totalmente pillada, enamorada o como quieras llamarlo por él.Sí, él, un chico, un tío, un hombre, llamalo como quieras, el caso es que hay algo en el que hace que te pierdas, que te de una puta sensación en el estómago cada vez que te sonrie, que te dice que te quiere, cada vez que te roza, cada momento juntos. Cuando ves que todo progresa perfectamente, ocurre. Sí, todo se rompe, se cae, se va al pique todos tus planes, todos esos besos, esas palabras, todo queda atrás, en el aire. Intentas no llorar, intentas seguir tu vida, siendo feliz, sonriendo sin darte cuenta de que es imposible. Que le necesitas a él. Y cuando pasa esto, ¿Qué te dicen tus amig@s? Tía, pasa de él. Es un niñato inmaduro que no te merece, vales mucho más que él, ve a por otro, buscate algo mejor. ¿Y que dices tú? Ya, pero es que es mi niñato, mi inmaduro, mi imbécil, que aunque no me merezca le quiero, que aunque valga mucho más que él, él para mi vale el mundo, no quiero ir a por otro, ¿no os queda claro que quiero volver a conseguirle? No, eso nunca queda claro.

Valió la pena.


Quién sabe la suerte que nos deparará esta vez la vida, las cartas que nos repartirá esta vez, la forma en la que las jugaremos. Algunas veces ganaremos, otras veces perderemos, pero siempre nos quedará la ilusión de que después de todo esto llegará algo grande, algo que mueva montañas, que se eleve más alto que las nubes, algo que nos haga ver que todo este tiempo de lucha ha valido la pena.

Quiero.


Quiero besarte.
Pero no lo leas así, joder. Le quitas toda la emoción al verso. Lee entre lineas. Haz un esfuerzo. Ponte en situación. Imagina que estoy frente a ti. Que estoy cerca. A cuatro, tres, dos centímetros de ti. Que mis manos suben despacio, por tu espalda, por tu cuello... Que sólo estamos tu y yo. Que te atraigo hacia mí y pasamos a medir las distancias en milímetros. A estas alturas ya deberías sentir mi respiración, ya deberías escuchar como te digo al oído... Te quiero.

El día más maravilloso del año.

Lo que más me gusta de ti es la facilidad que tienes para hacerme olvidar el resto del mundo cuando estoy a tu lado. Olvido todos mis problemas, mis dudas y mis preocupaciones. Y me encanta la manera en la que me haces reír despreocupadamente, como si no hubiera nada en el mundo que pudiera destruirme. Porque tú eres capaz de convertir el día más gris, en el más precioso y maravilloso día del año.

Lo prometo.

Siempre he creído que el amor no estaba hecho para mi y que yo no iba a tener una verdadera historia de amor... me había hecho a la idea, tenía perfectamente asumido que las historias bonitas solo le ocurrían a los demás y tuviste que llegar tú... joder...
- ¿Y?
- Pues que de repente me enamoré como una idiota, y se me olvidaron todas esas ideas que siempre había tenido en la cabeza y empecé a creer que lo nuestro podría ser de verdad una historia de amor, como las que solo les pasan a los demás. Llegaste con ese encanto y esa valentía, con ese aire de durito y esa sonrisa que hipnotiza y me enseñaste que el amor existe para todos... mierda... ya estoy llorando, ¿lo ves? ¡Antes nunca habría llorado por un tío como tú!
- No lo entiendo... ¿qué tiene eso de malo?
- ¡Pues que se me va a correr el maquillaje y voy a parecer más estúpida todavía!
- Eres divertida hasta sin quererlo, no me refería a eso pero de todas formas hasta con toda la cara negra estás preciosa. Lo que quería preguntar es que que tiene de malo que te hayas enamorado, que hayan cambiado tus ideas... ¿que tiene de malo ser feliz en una historia de amor?
- Pues que no sé si tú sientes exactamente lo mismo que yo, que es todo demasiado perfecto y siento que no puede ser verdad... ¿lo entiendes?
- Te quiero, de verdad, esto es completamente real y nunca jamás te haría sufrir, eres la chica más espectacular que he conocido y nunca te dejaré escapar, lo prometo... ahora deja de llorar y ven aquí... como cada buena historia de amor necesitamos un beso apasionada debajo de la lluvia.
- Pero si no llueve...
- Da igual, nos imaginaremos que sí.